
27 May El "lujo" de ser celiaco
La enfermedad celíaca se caracteriza por una intolerancia permanente al gluten, una proteína que se encuentra en el trigo, cebada, centeno y avena. Al ingerirla, se produce una mal absorción de los nutrientes que la acompañan, produciendo síntomas como diarrea, estreñimiento y pérdida de peso. Según numerosos estudios realizados en la población española, 2 de cada tres celíacos están sin diagnosticar…teniendo en cuenta que uno de cada 100 españoles es celíaco, resulta ser un problema bastante frecuente en nuestro país.
El único tratamiento para esta enfermedad es llevar una dieta libre de gluten toda la vida. Es importante seguir esta dieta estrictamente, ya que pequeñas cantidades de gluten continuadas de por vida pueden llegar a lesionar seriamente la mucosa del intestino.
Y aquí es donde está el problema: el 70 % de los alimentos que encontramos en el supermercado tiene gluten, y para un celíaco puede resultar toda una odisea tratar de alimentarse correctamente. Existe una gama cada vez más amplia de productos sin gluten, sí, pero a unos precios desorbitados, por no hablar de las dificultades que encuentran los celíacos a la hora de comer fuera de casa…cada vez existen más restaurantes para celíacos, pero por sus precios los convierten en auténticos restaurantes de lujo.
A pesar de que algunas Comunidades Autónomas (pocas) conceden pequeña ayudas de tipo económico o en forma de lotes de alimentos, España es uno de los pocos países europeos que no otorga ningún tipo de ayuda a nivel estatal a los afectados por la enfermedad celíaca: por poner un ejemplo, en Suecia, los productos “Sin Gluten” son gratuitos para los menores de 16 años.
Actualmente en nuestro país, ser celíaco es todo un lujo que muchos se ven obligados a adoptar, pues no existe una alternativa cuando se trata de cuidar nuestra salud. Sin embargo, sí podemos seguir un consejo muy útil: ¡cocina!; cuanto más procesado sea un alimento, más probabilidad tendremos de encontrar gluten en su composición (incluso no declarado en el etiquetado), así que un buen método para comer de forma segura y sin arruinarse, es elaborar de forma casera caldos, salsas, pan, bollería y todo lo que se te ocurra…siempre va a salir más barato comprar un kilo de harina de maíz (que no lleva gluten) que un kilo de magdalenas “sin gluten”.